Las lavanderías industriales en Toledo son cada vez más frecuentes. Muchos clientes piensan que el funcionamiento de un negocio de este tipo es sencillo, pero nada más alejado de la realidad.

Para poder prestar un buen servicio, una lavandería necesita contar con el equipo necesario, dependiendo del tipo de clientes que atenderá. ¿Sabes cómo funcionan las lavanderías industriales en Toledo? Aquí te lo contamos.

En primer lugar, una lavadora industrial tiene sus diferencias al compararla con una lavadora doméstica. Estas máquinas se encargan de eliminar la suciedad de las prendas, así como las bacterias que tienden a proliferar en los tejidos.

Para facilitar el trabajo, pueden almacenar en su memoria hasta 30 programas de lavado previamente establecidos por los operarios. Además, resisten a prolongadas horas de uso.

El proceso de centrifugado de estas lavadoras es bastante potente, entre 1000 y 1500 r.p.m., por lo que son ideales para tejidos como cortinas o toallas. Sin embargo, cuando se trata de prendas más delicadas, también cuentan con ciclos de centrifugado más suaves, de 800 r.p.m.

Después del lavado, se debe proporcionar a las prendas un buen secado. Las secadoras industriales eliminan por completo los restos de agua por aplicación de calor, el cual también ayudará a eliminar las bacterias que hayan quedado en las telas.

Hay varios tipos de secadoras industriales, que se clasifican dependiendo de su método de funcionamiento, es decir, de la forma en que expulsan la humedad extraída de las prendas. Las hay de evacuación y ventilación, de condensación o bombas de calor.

Por último, tenemos las planchas, que pueden ser manuales o tratarse de trenes de planchado, más utilizados para mantelería, ropa de cama o piezas de gran tamaño.

Desde Lavandería Industrial Robila recomendamos a los negocios de restaurantes, hoteles o spas delegar el cuidado de la ropa a empresas de lavandería industrial.